martes, 31 de enero de 2012

martes, 24 de enero de 2012

El pájaro canta hasta morir

Frases inteligentes

EL DISCURSO MAS CORTO

El discurso más corto...por Bryan Dyson, ex Presidente de Coca Cola… Lo dijo al dejar el cargo de Presidente de Coca Cola.



"Imagina la vida como un juego en el que estás malabareando cinco pelotas en el aire. Estas son: - Tu Trabajo, - Tu Familia, - Tu Salud, - Tus Amigos y - Tu Vida Espiritual, Y tú las mantienes todas éstas en el aire.


Pronto te darás cuenta que el Trabajo es como una pelota de goma. Si la dejas caer, rebotará y regresará. Pero las otras cuatro pelotas: Familia, Salud, Amigos y Espíritu son frágiles, como de cristal. Si dejas caer una de estas, irrevocablemente saldrá astillada, marcada, mellada, dañada e incluso rota. Nunca volverá a ser lo mismo. Debes entender esto: apreciar y esforzarte por conseguir y cuidar lo más valioso.






Trabaja eficientemente en el horario regular de oficina y deja el trabajo a tiempo. Dale el tiempo requerido a tu familia y a tus amigos. Haz ejercicio, come y descansa adecuadamente. Y sobre todo.....crece en vida interior, en lo espiritual, que es lo más trascendental, porque es eterno. Shakespeare decía:Siempre me siento feliz, ¿sabes por que?Porque no espero nada de nadie;esperar siempre duele. Los problemas no son eternos,


siempre tienen solución.


Lo único que no se resuelve es la muerte.


La vida es corta, ¡ por eso ámala.! Vive intensamente y recuerda: Antes de hablar... ¡ Escucha !


Antes de escribir... ¡ Piensa !


Antes de criticar... ¡ Examínate !


Antes de herir... Siente


Antes de orar... Perdona


Antes de gastar... Gana


Antes de rendirte...intenta ANTES DE MORIR.....VIVE…!!






jueves, 19 de enero de 2012

Grabadas en mi pecho

Tal vez mi presencia te molesta,
al percibir mis sentimientos profundos,
pero sé que te conmueves en la noche,
cuando mis versos penetran en tu mundo.


Por eso te envío este poema,
para unir tu espíritu al mío,
para entrar en tu alma solitaria,
y llenar por siempre, todos tus vacíos.


Al escribirte a ti, me siento libre,
puedo demostrar sin trabas que te quiero,
e intentar que me ames por dentro.


Quiero que escuches mi voz, pruebes mis besos,
quiero que tiembles con mis palabras,
y que queden grabadas en tu pecho.




Gabriel Tornabene








Mi corazón se queda aunque mi amor se vaya ,



porque el recuerdo nace de un ansia de olvidar.


Tu amor tiene la tibia ternura de una playa;


mi amor es inestable como el viento y el mar.





Aunque mi amor se vaya no has de quedarte sola,


pues te dejo el reflejo de la luz que encendí:


Tu amor es una playa , mi amor es una ola,


y necesariamente yo he de volver a ti.




José A. Buesa





Dos palabras - Alfonsina




Esta noche al oído me has dicho dos palabras


comunes. Dos palabras cansadas


de ser dichas. Palabras


que de viejas son nuevas.




Dos palabras tan dulces, que la luna que andaba


filtrando entre las ramas


se detuvo en mi boca. Tan dulces dos palabras


que una hormiga pasea por mi cuello y no intento


moverme para echarla.




Tan dulces dos palabras que digo sin quererlo—¡oh, qué bella, la vida!—


Tan dulces y tan mansas


que aceites olorosos sobre el cuerpo derraman.




Tan dulces y tan bellas


que nerviosos, mis dedos,


se mueven hacia el cielo imitando tijeras.




Oh, mis dedos quisieran


cortar estrellas.




Alfonsina Storni

Simil del árbol - José Angel Buesa




Árbol ya largamente florecido,


con el tronco tatuado de iniciales,


lo dejaron en pie los vendavales,


sin una hoja, ni una flor, ni un nido,





igual que un corazón envejecido


que aún palpita, sin bienes y sin males,


lleno de sal, como los litorales,


con fatiga de amor y sed de olvido.





Pero en el árbol se detuvo un día,


para cantar, un pájaro viajero,


y el tronco aquel sintió que florecía...





como florece un corazón huraño,


para después sentir que le hace daño


la flor tardía de su amor postrero.





                      José Angel Buesa

Dile que no me tema




Dile que no me tema, amor, y dile

Que estoy a su lado como el aire,

Como un cristal de niebla o como el viento

Que se aquieta en la tarde.

Dile que no me huya, amor, y dile

Que no me vuelva a herir, que no me aparte,

Que soy el brillo húmedo en sus ojos

Y el latido de su sangre.

Dile que no me aleje, amor, y dile

Que yo soy el umbral de su morada,

El agua de su sed

Y aquel único pan para su hambre.

Dile que no se oculte, amor, y dile

Que ya no tengo rostro ni señales

De haber vivido antes de quererme.

De haber vivido, antes.

Dile que no recuerde y dile

Que no respire, amor, sin respirarme.

Julia Prilutzky Farny

viernes, 13 de enero de 2012

La Hora -


Tómame ahora que aun es temprano

y que llevo dalias nuevas en la mano.



Tómame ahora que aun es sombría

esta taciturna cabellera mía.



Ahora que tengo la carne olorosa

y los ojos limpios y la piel de rosa.



Ahora que calza mi planta ligera

la sandalia viva de la primavera.



Ahora que mis labios repica la risa

como una campana sacudida a prisa.



Después..., ¡ah, yo sé

que ya nada de eso mas tarde tendré!



Que entonces inútil será tu deseo,

como ofrenda puesta sobre un mausoleo.



¡Tómame ahora que aun es temprano

y que tengo rica de nardos la mano!



Hoy, y no mas tarde. Antes que anochezca

y se vuelva mustia la corola fresca.



Hoy, y no mañana. ¡Oh amante! ¿no ves

que la enredadera crecerá ciprés?


Juana Ibarbourou

miércoles, 11 de enero de 2012

La Canción de la espera - José Angel Buesa




Espero tu sonrisa y espero tu fragancia


por encima de todo, del tiempo y la distancia.


Yo no sé desde dónde, hacia dónde, ni cuándo


regresarás... sé sólo que te estaré esperando.






En lo alto del bosque y en lo hondo del lago,


en el minuto alegre y en el minuto aciago,


en la función pagana y en el sagrado rito,


en el limpio silencio y en el áspero grito.






Allí donde es más fuerte la voz de la cascada,


allí donde está todo y allí donde no hay nada,


en la pluma del ala y en el sol del ocaso,


yo esperaré el sonido rítmico de tu paso.






Comprendo que de mí ya se ría la gente


al ver cómo te espero desesperadamente.


Cuando todos los astros se apaguen en el cielo,


cuando todos los pájaros paralicen el vuelo


cansados de esperarte, ese día


lejano yo te estaré esperando todavía.






No importa: aunque me digan todos que desvarío,


yo te espero en las ondas musicales del río,


en la nube que llega blanca de su trayecto,


en el camino angosto y en el camino recto.






Niño, joven o anciano, sonriendo o llorando,


en el alba o la tarde, yo te estaré esperando,


y si me convenciera que ese ansiado día


no habría de llegar, también te esperaría.






José Angel Buesa


Amor tardío - José Angel Buesa

Tardíamente, en el jardín sombrío,


tardíamente entró una mariposa,


transfigurando en alba milagrosa


el deprimente anochecer de estío.



Y, sedienta de miel y de rocío,


tardíamente en el rosal se posa,


pues ya se deshojó la última rosa


con la primera ráfaga de frío.



Y yo, que voy andando hacia el poniente,


siento llegar maravillosamente,


como esa mariposa, una ilusión;



pero en mi otoño de melancolía,


mariposa de amor, al fin del día,


qué tarde llegas a mi corazón...





sábado, 7 de enero de 2012